Concretamente las emisiones de CO2 al circular por una carretera en mal estado pueden aumentar un 9%. Así lo confirma la Asociación Española de la Carretera (AEC) tras realizar pruebas reales y publicarlas en su estudio ‘Análisis de la relación entre el estado de conservación del pavimento, el consumo de combustible y las emisiones de los vehículos’.
Un dato que puede echar por tierra los objetivos climáticos del Gobierno si tenemos en cuenta que el 53% de la red viaria cuenta con un pavimento en mal estado. Hablamos de 53.500 kilómetros de carreteras en España. En este vídeo te explican cómo se ha desarrollado todo el análisis:
Este aumento de emisiones de CO2 puede alcanzar el 9% en el caso de vehículos ligeros cuando el pavimento presenta un deterioro realmente importante, con grietas en las rodadas, baches, deformaciones, agrietamiento grueso, desintegraciones graves. Si el deterioro es superficial, con agrietamiento fino, desintegraciones ligeras, descarnaduras, exudaciones…, las emisiones aumentan un 5%. En el caso de vehículos pesados, hablamos del 6% y 4%, respectivamente.
¿Y si circulamos por una carretera bien asfaltada?
Los ensayos confirman que en el caso de circular con un vehículo ligero, es decir un turismo, moto o furgoneta ligera, por una carretera cuyo pavimento está en buen estado, las emisiones de CO2 se reducirían una media del 3,5%, una reducción que llega al 4% en el caso de vehículos pesados. Los ensayos se han realizado en un tramo de 46 kilómetros de longitud.
Cómo salvar 120 estadios de fútbol llenos de pinos
Según la AEC, si se asfaltan estas vías deterioradas (53.500 km) durante los próximos 10 años se reducirían las emisiones de CO2 un 6%, el equivalente a lo que absorberían 120 estadios de fútbol llenos de pinos durante una década. Para eso necesitamos que se inviertan 330 millones de euros al año.
¿Y sabías que con solo repavimentar la mitad de la red de carreteras españolas ahorraríamos 1.600.000 toneladas de CO2 al año? Es el equivalente a las emisiones de todo el tráfico de la ciudad de Madrid durante 8 meses.
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Otras consecuencias de una carretera en mal estado
Pero conducir por una carretera con el asfalto en mal estado trae más inconvenientes:
- Se dispara el consumo de combustible. La AEC calcula que se consumen 600 millones de litros más al año por culpa del deterioro del asfalto. Consulta tienes diez claves para una conducción más eficiente.
- Aumenta el riesgo de accidente por un desgaste prematuro de los neumáticos que puede llegar al 3% en los vehículos ligeros y al 2% en los pesados. Además, puede provocar otros daños en el vehículo, sobre todo en el sistema de suspensión.
Por todas estas razones, la Asociación Española de la Carretera hace un llamamiento a la necesidad y la urgencia de actuar en la mejora de la red viaria. «De lo contrario, los objetivos climáticos a los que se ha comprometido el Gobierno, que pasan por reducir las emisiones del transporte un 32% hasta 2030, serán papel mojado».
