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El incierto futuro del diésel no será como la mayoría cree

precio gasoil

No es nuevo, ya llevamos un tiempo en el que los vehículos diésel están en el punto de mira, el diésel es demoníaco, es malo, es veneno y se debe erradicar. Para colmo, la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribero, ha afirmado que “el diésel tiene los días contados”. Por eso el mix de ventas por combustibles está cambiando drásticamente y los gasolina empiezan a ser mayoría. ¿Pero estas creencias tienen un fundamento real?

futuro diesel

Sí, los motores diésel pueden ser más perjudiciales para la salud que los de gasolina… si no se controlan y limitan sus emisiones. Toda esta demonización de los motores alimentados por gasoil comenzó con el famoso Dieselgate y las trampas de Volkswagen (y otros) en las pruebas de homologación de sus vehículos.

Fue entonces cuando se centró la atención en los diésel, vehículos que en Europa encabezaban las listas de ventas año tras año y no por casualidad, ya que se ha promocionado la venta de los diésel durante años.

Si hablásemos de mantener en producción los motores diésel antiguos, es lógico pensar en eliminarlos, pero los modernos son mucho más limpios, y más que pueden ser. Además, los motores diésel tienen un consumo menor, por lo que para ciertas formas de uso y ciertos vehículos son incluso necesarios.

Nuevas tecnologías para los diésel

¿Es imposible conseguir motores diésel más limpios? Claro que no. Las emisiones de los diésel resultan más nocivas porque no se han controlado como se debería haber hecho. Pero hoy ya existe tecnología capaz de permitir que los diésel sean muchísimo más limpios de lo que son, de hecho permite tener unas emisiones de NOx casi diez veces inferiores a las máximas que se permitirán en 2020 y sin necesidad de añadir piezas y componentes nuevos.

Bosch convierte los diésel en coches de bajas emisiones, ahora y sin añadir componentes

Bosch emisiones diésel

Somos capaces de desarrollar coches diésel de bajas emisiones, pero serán caros, no nos llevemos a engaño. El futuro del diésel no será su extinción, pero su evolución le llevará a perder cuota de mercado en favor de los motores de gasolina, gas, híbridos y eléctricos. Los diésel quedarán para los que verdaderamente necesiten un vehículo con esas características.

La evolución del diésel

¿Y cuál será esa evolución del diésel? El primer paso es reducir las emisiones manteniendo la configuración mecánica sin grandes cambios, es decir, mejorando la gestión del combustible y el tratamiento de los gases de escape. Pero esto no será suficiente en el medio plazo y empezarán a hibridarse, de forma suave (como el Kia Sportage Mild-Hybrid diésel) y también por completo, como los motores de gasolina. PSA, por ejemplo, ya comercializó híbridos diésel, aunque con poco éxito por la falta de refinamiento en su mecánica y consumos elevados para una tecnología tan complicada, y la apuesta de Mercedes-Benz por los híbridos diésel es total.

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Mild Hybdrid de Kia

Diferentes usos, diferentes coches

Parece que empezamos a tener más claro que debemos barajar diferentes posibilidades de motorizaciones en función del uso que se vaya a dar del vehículo. La proliferación de motores movidos por energías alternativas y sus limitaciones junto al carsharing poco a poco hacen que vayamos siendo conscientes de qué es lo que más nos interesa. Me explico.

Renault ZOE

La autonomía de los coches eléctricos es su gran hándicap, pero para uso urbano estos coches son perfectos. Los híbridos enchufables no aportan ahorro a todos por igual, pero si a diario recorres menos de cien kilómetros puede ser tu vehículo ideal. Estas limitaciones o probar a utilizar el coche compartido, hace que nos planteemos el uso real que damos a nuestro vehículo. Empezamos a romper barreras psicológicas y ser conscientes de que no necesitamos una autonomía de 400 kilómetros para un uso diario, como tampoco necesitamos entrar al centro de la ciudad con nuestro propio coche. Otra gran zona de Madrid se va a cerrar al tráfico en breve y no debemos echarnos las manos a la cabeza, porque en realidad vamos tarde y sólo nos estamos sumando a lo que ya sucede en muchos otros países.

Futuro a corto y medio plazo

El despegue de los vehículos movidos por energías alternativas es complicado y costoso. Su precio es superior y, en muchos casos, necesitan de una infraestructura que hoy no está suficientemente desarrollada. Seguirán creciendo en cuota de mercado, pero poco a poco.

Por tanto, el futuro a corto plazo apunta a una continuación del incremento de ventas de los vehículos de gasolina, que ya se están convirtiendo en mild-hybrid o híbridos suaves y esta mutación cada vez será más generalizada. Y los diésel seguirán vivos, no exactamente como hoy los conocemos ni como reyes absolutos del mercado, serán más limpios y menores en número, pero todavía no tienen los días contados.

Iván Solera
Mi especialidad son las pruebas de coches y motos. También soy formador de automoción y, aunque en mi garaje se acumulan los vehículos clásicos populares, disfruto probando las últimas tecnologías.

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